DIA VII

Lunes 04 de Diciembre de 2006

Bueno, hoy sí que madrugué. Es que tenía una batalla personal que librar con mi valija y me iba a llevar tiempo.
Desayuné a las 9.00, y subí a pelear con mi equipaje. Tenía que dejar la habitación a las 11.00. Fue duro, muy duro, pero al final pude cerrar la valija. De todos modos me quedó una enorme bolsa para llevar en la mano, pero bué...

Afuera hacía un precioso día soleado. Por fin una tregua!! Caminé sin rumbo por las calles aledañas, y me fui en dirección a Nieuw Markt para tomar el metro.

Le tuve que preguntar a un guardia gordo cómo tenía que usar la Strippenkaart, jejeje. El metro no es nada de otro mundo. La prioridad la tiene el tranvía. Es decir, primero que nada las bicicletas, después el tranvía, después los autos, y por último el metro, por lo que está bastante dejado.
Lo gracioso del metro es que cuando sale de la ciudad, emerge a la superficie y en vez de metro se convierte en tren, jajaja.

Me bajé en la estación Arena, y ahí lo vi, regenteando el horizonte. El colosal estadio del Ajax de Amsterdam. Es realmente gigantesco. Le había prometido al Andrés que iría a verlo.
La verdad que tiene una arquitectura bastante interesante. Fue inaugurado en 1996 por lo que es bastante nuevo. Tiene sólo 10 años.
Hasta tiene una autopista que le pasa por abajo!! Y como no podía ser de otra manera, está rodeado por un canal, jeje...

Le di toda la vuelta. Del otro lado me encontré con un mundo nuevo. Montones de edificios de cristal super modernos, un gigantesco shopping center, el "Pepsi Stage" y el Heineken Music Hall!!. Parece que ahí es donde sucede todo, jeje.

Del lado opuesto a la autopista me topé con la tienda de souvenirs... oops!! Jejeje. Compré un par de boludeces para mis hermanos futboleros y volví para Amsterdam.

Aproveché para bajarme en Centraal Station. Me tomé un cafecito (con una medialuna!!) porque ya era hora de la merienda (y tenia bastante sueño además de hambre, jojo!)

Ahí al lado del cafetín estaba la central de turismo. Me contraté un paseo en barquito por los canales, una porque me lo había recomendado mi mamá (muy buena recomendación) y es lo único que me faltaba hacer, y otra porque me encanta andar en barco!!!
Crucé el puente hasta el muellecito de donde partíamos. El capitán, más pinta de capitán imposible.

El barquito salió para arriba, es decir, rumbo al rio ese que separa Amsterdam del norte. Según el mapa se llama Het IJ, pero no sé, me suena como que quiere decir "el rio", jajaja. Vimos el otro lado de la estación central, y el eterno ir y venir del Ferry Gratis, que comunica las dos orillas.

Se metió por el Oosterdok, donde vimos el extraño edificio del NEMO, que simula un barco. Un poco más allá, frente al Scheepvartmuseum, había una bellísima réplica a escala real del Amsterdam, el primer barco de la VOC (la Compañía de las Indias Orientales) que se hundió en las costas de Inglaterra en su primer viaje (:s) y que yo ya había conocido en Madurodam. Que groso! No? Era precioso. A mí me puso la piel de gallina, ya saben como me gustan esas cosas de otras épocas. Según relató la guía, el barco fue construido como un programa de inserción laboral, dándoles trabajo a centenares de personas sin experiencia laboral, que a partir de ahí ganaron un oficio.

Y bueno, de ahí nos fuimos metiendo por los canales de Amsterdam, mientras aprendíamos un poco de historia y curiosidades en general. La verdad que fue muy interesante. Y fotográficamente jugoso, lástima que me quedé sin pilas en la mitad del recorrido, por sacarle tantas fotos al estadio... :s me cuesta administrar eso todavía, jjejeje.
Incluso nos explicaron por qué todas las casas tienen el malacate ese en la punta, que me tenía sumamente intrigada!!

Bueno, de vuelta al puerto, al frío!! Volví al hostel, reacomodé un poco mi equipaje, debido a las nuevas adquisiciones, y salí para el aeropuerto. Salí bastante más temprano, por las dudas. Qué me garantizaba que no le iba a errar de tren, o de aeropuerto?? Qué se yo, por las dudas salí con tiempo, a la Maly, jajaja. Prefería estar al pedo en el aeropuerto que en el hostel.

Igual, me costó un poco despedirme de esta ciudad maravillosa...

Me tomé el tren correcto, me bajé en el aeropuerto correcto, e hice el check-in una hora y media antes de lo recomendado. Por fin me pude deshacer de la valijota. El equipaje no menguó mucho, ya que todavía tenía la cartera a reventar, la cámara de fotos en su estuche, la mochila con la compu y diez mil cosas más y la bolsa con las cosas que no me habían entrado en la valija y eran lo suficientemente inocuas como para que me dejen llevarlas en la cabina.

Hice una pasadita por Burger King, ya que tenía tanto tiempo, y comí como una cerda. Afuera se largó a llover horriblemente.
Por las dudas busqué la Gate con tiempo, y menos mal porque me llevó como 25 minutos de caminata!! Qué aeropuerto más grande!!

Apenas despegar, cuando pasamos la capa de nubes, me dormí. Me duermo en todos lados últimamente. Ya parezco Miguel Mendes.

Llegamos a Barcelona 10 minutos antes de lo previsto. Me esperaba otra odisea. Entre que retiré la valija, tomé el aerobús hasta Plaça Espanya, esperé media hora el NitBus, caminé tres cuadras hasta casa con la valija que ya tenía una rueda chusa, y tal, llegué a casa como a la 1.30 de la mañana, muerta....

Hogar, dulce hogar....

Ahí nomás me acosté a dormir, y acá estoy, ya trabajando, de vuelta a la vida adulta.

Este viaje fue maravilloso, una aventura fantástica. Una vez más, fui con ciertas expectativas que se superaron más de lo que esperaba, y me he traído recuerdos invalorables...

Una ciudad bellísima, una historia interesante, experiencias inolvidables, un montón de descubrimientos y aprendizajes y un poco de familia... qué más podía pedir??

Espero que hayan disfrutado nuestro viaje (pero que no hayan terminado tan cansados como yo, jeje) Y gracias por hacerme compañía... siento que no viajé sola...

Hasta la próxima aventura!!!